LifeVac es un aparato succionador revolucionario que ha salvado más de 200 vidas desde su desarrollo.
En 2011, Arthut Lih visitó a un amigo en el hospital. Cuando llegó allí se encontró una escena de dolor inmensa, y al preguntar de qué se trataba, fue informado de que un niño de 7 años acababa de fallecer atragantado con una uva. Lih preguntó por qué no le habían hecho la maniobra de Heimlich. Su amigo le explicó que sí habían practicado la maniobra en el niño pero que no funcionó. Los sanitarios no pudieron extraer la uva de la tráquea del pequeño, que murió asfixiado.
Ante tal atroz suceso, Arthur pensó en su hija, que en ese momento tenía 7 años, y se dijo a sí mismo que no permititiría que algo así le pasase a “su pequeña”. De este modo, comenzó a investigar sobre otras opciones para evitar la axfixia pero solo encontró un dispositivo intrusivo que podría empeorar la situacuón en caso de utilizarse de forma incorrecta.
Abrumado por la falta de alternativas, decidió desarrollar su propio succionador: LifeVac. Este aparato se conforma de una mascara parecida a las de oxigeno y un mecanismo de muelle similar al de un desatascador. De esta forma, y mediante la fuerza inversa, se consigue sacar el obstáculo de las vías aéreas del paciente.
El atragantamiento es un problema muy grave siendo una de las primeras causas de muerte accidental en España y produce 2.300 fallecidos al año en el país. Estos son más muertos que los producidos por accidentes de tráfico. La cifra de fallecidos es tan alta ya que en caso de una obstrucción total a partir de 4 minutos comienza la muerte cerebral y en tan solo 10 minutos la muerte cerebral es muy probable.
Por tanto, en la mayoría de los casos los servicios de emergencia llegan demasiado tarde y una rápida actuación es fundamental. Desde que se describiera la Maniobra de Heimlich en los años 70, se ha avanzado muy poco en este área a pesar de la gravedad de estos accidentes. Ahora contamos con una herramienta fácil de usar y no invasiva que se está probando como efectiva.
¿Cómo utilizo LifeVac?
Una vez adquirido el preoducto, es necesario probarlo y familiarizarse con su funcionamiento con el objetivo de saber utilizar el producto antes de que ocurra una situación de emergencia. De igual modo, todas las personas susceptibles de utilizarlo deben realizar este proceso de prueba. Esto aumentará considerablemente las probabilidades de éxito ante una emergencia.
Estas pruebas pueden realizarse sobre una superficie plana como una mesa o una blanda como la pierna. Los pasos a realizar son los siguientes:
- Desenvuelva una mascarilla y retírele el anillo de plástico de color. Inserte la mascarilla en la unidad girándola al mismo tiempo que ejerce presión. Compruebe que la mascarilla está correcta y firmemente sujeta.
- Con una mano, fije la mascarilla y con la otra mano, empuje el mango hacia abajo. Oirá una ráfaga de aire saliendo del dispositivo.
- Una vez totalmente hundido, ha de tirar del mango rápidamente. Notará el vacío (presión negativa) que genera la unidad LifeVac.
- Una vez familiarizado con la unidad LifeVac, retire la mascarilla tirando de ésta y girándola, al mismo tiempo que sujeta la base de la unidad. Debe costarle retirar la mascarilla. En tal caso, la mascarilla estaba asegurada de forma adecuada. Guarde la mascarilla.
- Vuelva a colocar la unidad LifeVac, las mascarillas y las instrucciones en la caja y guárdela en un lugar seguro, seco y accesible en caso de emergencia.
En caso de emergencia real, estas son las instrucciones que deben seguirse:
- Elija el tamaño de mascarilla adecuado y deseche el anillo de plástico de color. Inserte la mascarilla en la unidad girándola a la vez que ejerce presión. Asegúrese de comprobar que la mascarilla está bien sujeta a la unidad.
- Coloque la mascarilla sobre la nariz y la boca, con la boca entreabierta y manteniendo la barbilla hacia arriba. Debe sujetar firmemente con la mano la mascarilla sobre la nariz y la boca. Asegúrese de que no entra aire dentro de la mascarilla
- Mientras con una mano, sujeta la mascarilla en su lugar y mantiene la barbilla del paciente hacia arriba, empuje hacia abajo el mango con la otra mano para comprimir la unidad.
- Una vez hundido el mango, tire del mango hacia arriba de forma rápida, al mismo tiempo que sujeta la mascarilla firmemente en su lugar
- Coloque a la persona de lado y retire los restos de la boca. Asimismo, compruebe si la unidad presenta restos.
- Repita este procedimiento si es necesario y si no hay respiración espontánea, inicie la RCP (reanimación cardiopulmonar).
Su objetivo: salvar vidas
Desde su creación, gracias a LifeVac se han salvado 220 vidas en todo el mundo, de diversas edades, desde bebés con pocos meses de vida, hasta personas que han superado los 90 años. Los atragantamientos se han producido con objetos y alimentos diversos: sándwiches, naranja, trozos de carne, monedas, galletas o una pieza de Lego entre otros.
Para Arthur todas estas vidas salvadas no son un número sino historias reales. Y un motivo de inmensa alegría y motivación. Como homenaje a todos ellos, y a las personas que confiaron en LifeVac, Arthur ha creado el “Muro de las vidas salvadas” creado con todas las fotografías que envían los usuarios y que crece imparable de día en día. Arthur Lih, en la sede de LifeVac de Nueva York, muestra orgulloso todas las fotografías de estos protagonistas accidentales.
Además, LifeVac cuenta con campañas de formación para conseguir reducir las muertes por Asfixia por Atragantamiento por año de 160.000 a 5000 en poco tiempo. Si quiere conocer más sobre este dispositivo y sus beneficios visite la web oficial https://lifevac.es/.
Si quiere conocer más sobre dispositivos médicos innovadores, visite el apartado Salud y Belleza en nuestra web.